Arabia Saudí está construyendo desde cero la mega ciudad Neom: estas otras 7 ciudades también surgieron de la nada

Cuando una ciudad se desarrolla, normalmente es un proceso largo. Diversos factores, como la ubicación geográfica, el acceso al agua o la situación económica, contribuyen a que pequeñas aldeas se conviertan en grandes urbes. Sin embargo, no todas las grandes ciudades surgieron de esta manera. Algunas surgieron por decisiones políticas y se construyeron en un corto periodo de tiempo.

Megaproyectos como la ciudad planificada Neom de Arabia Saudí han llamado la atención en los últimos años. Pero esto no es un fenómeno nuevo. En algunos casos, incluso se ha olvidado que estas ciudades fueron originalmente planificadas.

En Arabia Saudí, se proyecta la construcción de una nueva ciudad: 170 kilómetros de longitud, 500 metros de altura y 200 metros de ancho. Está claro que no será una ciudad ordinaria. Imágenes en la página web del proyecto muestran una fachada de vidrio aparentemente infinita, que se extiende desde el desierto hasta el mar Rojo.

The Line, como se llama esta ciudad compuesta por una mega estructura, es parte de Neom. El proyecto de construcción del gobierno saudí también incluirá un puerto, dos resorts y una zona industrial llamada Oxagon.

En The Line podrían vivir nueve millones de personas en 34 kilómetros cuadrados, según se indica en el sitio web. Sin embargo, en los últimos meses, el proyecto ha enfrentado algunos contratiempos importantes: según informó Bloomberg en abril, la finalización podría retrasarse considerablemente.

El proyecto, valorado en 500.000 millones de dólares, debería albergar a 1,5 millones de habitantes para 2030. Pero para entonces, probablemente solo se habrán construido 2,4 kilómetros, una fracción de la longitud planeada. En ese caso, solo 300.000 personas podrían mudarse allí.

Masdar City

Neom no es el primer proyecto de ciudad en la región. Los Emiratos Árabes Unidos, país vecino, son conocidos por sus ambiciosos proyectos de construcción. Allí se encuentra el Burj Khalifa, el edificio más alto del mundo. En Abu Dabi también está Masdar City. Cuando se inició esta ciudad planificada en 2006, se esperaba su finalización para 2016. Ahora se apunta al año 2030.

A diferencia de The Line, Masdar City ya tiene sus primeros habitantes. En 2023 vivían unas 3.500 personas en la ciudad planificada. Inicialmente, se había proyectado una población de 50.000 habitantes. Los iniciadores también tenían el objetivo de crear una ciudad neutral en cuanto a emisiones de carbono.

Aunque todavía no lo han logrado, se están tomando diversas medidas para reducir las emisiones de CO₂. La ciudad está rodeada de paneles solares, una vista que el ministro de economía alemán, Robert Habeck, pudo admirar en 2022 cuando visitó la ciudad para promocionar el hidrógeno en los Emiratos Árabes Unidos.

Nusantara

La capital de Indonesia, Yakarta, tiene una larga historia. Recibió el nombre de Jayakarta en 1527, aunque en ese entonces era más un puerto disputado. Más tarde, los colonos holandeses la llamaron Batavia y la hicieron capital de la colonia de las Indias Orientales Neerlandesas.

Durante la Segunda Guerra Mundial, los ocupantes japoneses la renombraron como Yakarta, nombre que mantuvo tras la independencia de Indonesia. Al menos hasta ahora.

En lugar de un cambio de nombre, se planea una reubicación. Debido al aumento del nivel del mar, el presidente saliente quiere trasladar la sede del gobierno. En el futuro, la política se llevará a cabo en Nusantara, en medio de la selva de Borneo.

Los críticos temen que la deforestación destruya aún más la naturaleza. Sin embargo, la mayoría de los aproximadamente 30 millones de habitantes de Yakarta no se mudarán, solo el gobierno dejará la gran ciudad.

Brasilia

Hace más de 60 años, Brasil se enfrentó a un desafío similar al de Indonesia hoy: necesitaba una nueva capital. Río de Janeiro había sido la sede del gobierno del país más grande de Sudamérica desde 1793. Pero en 1891, se decidió construir una nueva capital en el interior del país para formar una capital federal neutral. Sin embargo, no se avanzó durante mucho tiempo.

Fue recién en 1956 cuando el presidente Juscelino Kubitschek tomó la iniciativa. Durante su campaña, había prometido la construcción de la nueva capital. Se argumenta que la situación política en Río de Janeiro, marcada por intrigas, fue la principal razón para esto. La capital, construida en medio de la selva en tres años, es una de las ciudades planificadas más conocidas. Desde una vista aérea, su origen planificado es evidente: el núcleo urbano consiste en dos líneas que se cruzan, formando la figura de un avión.

Originalmente, la ciudad fue diseñada para 600.000 habitantes. En 2022, el distrito gubernamental albergaba a 2,8 millones de personas. Debido al crecimiento poblacional, han surgido numerosas ciudades satélite fuera del plano inicial. Vivir en el centro de la ciudad ha sido principalmente asequible para los brasileños acomodados.

San Petersburgo

San Petersburgo fue la primera ciudad planificada en la historia occidental que se construyó completamente en un terreno no urbanizado. El zar Pedro el Grande quería fundar una ciudad que se diferenciara de las otras ciudades rusas. San Petersburgo no solo debía ser una “ventana hacia Europa”, sino que también se construyó siguiendo el modelo europeo, especialmente el de Ámsterdam. Durante la construcción de la segunda ciudad más grande de Rusia, murieron probablemente decenas de miles de trabajadores.

Con una breve interrupción, San Petersburgo fue la capital de Rusia entre 1712 y 1918. Sin embargo, el zar tuvo que obligar a la nobleza rusa a trasladarse de Moscú a San Petersburgo. La nueva capital incluso tenía una policía oficial y un cuerpo de bomberos funcional.

Xiong’an

La fundación de la ciudad china de Xiong’an tuvo principalmente un objetivo: aliviar a la capital Pekín, situada a unos 100 kilómetros de distancia. Encargada por el presidente Xi en 2017, Xiong’an pretende liberar a Pekín de problemas como el tráfico, la sobrepoblación y las instalaciones “no esenciales”, según FAZ.

La administración y la política permanecerán en la capital china. Cuando esté finalizada, la ciudad planificada abarcará alrededor de 2.000 kilómetros cuadrados, casi tres veces el tamaño de Nueva York. La “ciudad de laboratorio”, como también se le llama, podría albergar 110 millones de habitantes al estar terminada.

Ya se han invertido 70,000 millones de euros en Xiong’an, pero se necesitará al menos la misma cantidad de nuevo para completar la ciudad. Sin embargo, el proyecto ha sido muy criticado. En 2018, Yin Zhi, profesor de la Universidad de Tsinghua en Pekín, desaconsejó la elección de la región.

Esto se debe a que el área se encuentra en uno de los puntos más bajos del norte de China, y hasta hace poco, era una cuenca de retención de agua para inundaciones. Ahora, las masas de agua no se absorben en cantidad suficiente. La ciudad cercana de Zhuozhou, hacia donde ahora se dirige el agua, es la principal afectada.

Durante una inundación en el verano de 2023, decenas de personas murieron y gran parte de los 600.000 habitantes de la ciudad perdieron sus hogares.

Mannheim

La actual ciudad universitaria fue mencionada por primera vez en documentos en el año 766. A diferencia de otras ciudades planificadas, Mannheim no surgió de la nada, ya existía un pequeño asentamiento. Mannheim se convirtió en ciudad cuando Federico IV le otorgó los derechos de ciudad en 1607. Antes, el príncipe había colocado la primera piedra de la fortaleza Friedrichsburg. Parte del plan de construcción también incluía una red de calles en forma de cuadrícula. Hoy en día, en lugar de la Friedrichsburg, se encuentra el Castillo de Mannheim, construido a partir de 1720. La estructura de calles característica se ha mantenido hasta la fecha.

En lugar de calles comunes, el centro de Mannheim está dividido en cuadrados. Para quienes no están familiarizados, una dirección en los cuadrados podría resultar inicialmente confusa. El centro de la ciudad está dividido en áreas de la A a la U. Las calles individuales, salvo algunas excepciones, no tienen nombres propios, sino que están numeradas.

A esto se le suma, por supuesto, el número de la casa. Una dirección habitual en la ciudad de los cuadrados, como también se llama al centro de Mannheim, sería entonces: U4 6.

Susanne Ködel, Daniel Alonso Viña

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