A este filósofo griego se le atribuyen grandes aportes en el campo de la matemática y se le considera el pionero del pensamiento racional. Conoce más del legado que nos dejó este sabio.
En la antigua ciudad jónica de Mileto, emergió un gran pensador que marcó un antes y un después en la manera de comprender el universo. Se trata de Tales de Mileto (624 a. C. – 546 a. C.), el primer filósofo de Occidente.
Muchos le consideran un sabio interdisciplinar, debido a su amplia influencia en las áreas científica, filosófica, matemáticas e inclusive de ingeniería. Es precisamente la figura de este intelectual la que abre las puertas al pensamiento racional, apartando lo que prevalecía como interpretaciones mitológicas del mundo.
Aquí haremos un recorrido por la vida y los aportes que nos dejó este erudito griego. Comentaremos, además, sus contribuciones y las anécdotas que caracterizan la historia de este estudioso. ¡Comencemos!
¿Quién fue Tales de Mileto?
Este erudito es considerado el primero de todos los filósofos griegos, así como un investigador de la naturaleza en Occidente. Se le reconoce también como el primer científico que experimentó con el mundo que lo rodeaba.
Nació alrededor del año 640 a. C., en la actual Turquía. Sus padres fueron los fenicios Examio y Cleóbula. Los registros que han llegado hasta nosotros sobre su vida nos detallan a un hombre curioso e indagador, práctico y realista. Por eso, se dice que tenía las características típicas de un pensador.
Durante la primera etapa de su vida, Tales se dedicó al comercio y los asuntos públicos. Luego de un tiempo, emprendió un viaje a Egipto, lugar en donde estudió astronomía y geometría, a partir de las enseñanzas impartidas por sacerdotes de Menfis y Dióspolis.
Este viaje fue muy importante en la vida del también matemático, ya que, a partir del mismo, su carrera como comerciante terminó y se dedicó de manera exclusiva a la rama filosófica y a la ciencia.
A este presocrático se le atribuye ser pionero en usar la razón para pensar el universo. Y esto en una época en donde predominaba el discurso mitológico y religioso.
Hallaba la base de sus teorías en la observación, estableciendo de este modo que cualquier sustancia podía convertirse en otra, considerando que dichas sustancias procedían de una misma materia y su principio común era el arché.
Además de sus intervenciones en las áreas de los números y del pensamiento, a Tales se le consideró un ilustrado consejero político de lidios y jonios, a juicio de Diógenes Laercio y Herótodo.
La escuela de Mileto o jónica
La escuela milesia o jónica tuvo sus inicios en el siglo VI a. C. en la ciudad natal del filósofo. Su fundador fue Tales y sus discípulos Anaximandro y Anaxímenes. Con su aparición surge la filosofía occidental.
Los integrantes de esta escuela utilizaron su capacidad de abstracción y de universalización para hallar la unidad primigenia que explica toda la realidad. A este fundamento lo llamaron arché o primer principio. El mismo funciona como la explicación racional sobre el origen del mundo.
Tales postuló que el agua era el primer principio de todas las cosas. Su discípulo Anaximandro, en cambio, sostuvo que el arché era lo indeterminado o apeirón en griego. Se trataba de una materia primitiva sin límites ni características propias.
Por su parte, Anaxímenes, discípulo de Anaximandro, consideró al aire como el primer principio. En este sentido, lo identificaba con la vida, ya que el aire que respiramos nos vivifica.
Principales aportes de Tales de Mileto
Las sentencias de este griego representaron una verdadera revolución para la época. De acuerdo con este intelectual, el pensamiento inicia el tránsito del mito al logos. A partir de ello, surgen los teoremas y razonamientos planteados por él.
El agua como primer principio
La frase con la que canónicamente se acepta el inicio de la filosofía es: «Todo procede del agua». Aristóteles, en su libro Metafísica, concede al filósofo ser uno de los precursores en atribuir una causa material al cosmos. Según su testimonio, Tales se dio cuenta de que todo lo que está vivo en la naturaleza también está húmedo.
«Tales, iniciador de tal filosofía, afirma que es el Agua (por eso también manifestó que la Tierra estaba sobre el Agua); y sin duda concibió esta opinión al ver que el alimento es siempre húmedo y que hasta el calor nace de la humedad y de ella vive».
Para este pensador, el agua o lo húmedo era el elemento primordial o arché a través del cual todas las cosas que conocemos se originaron. De esta manera, este primer principio era considerado como el alma y la esencia de todo lo que existe.
La tierra flotando en el océano
Propuso la tesis de que la tierra se encontraba flotando sobre el agua, del mismo modo en que otros elementos también lo hacen. De esta forma, el filósofo dio una explicación sobre por qué la tierra estaba en reposo. Lo fundamental de esto es que sus razones fueron racionales y no recurrió a relatos míticos o religiosos.
Teoremas matemáticos
El sabio se familiarizó con las matemáticas y la geometría en su viaje a Egipto. Cuando regresó a Grecia, introdujo sus conocimientos a la comunidad. En especial, se le atribuyen la formulación de cinco teoremas geométricos:
- El ángulo inscrito en un semicírculo es un ángulo recto.
- Un círculo es dividido en dos partes iguales por su diámetro.
- Los ángulos que componen un triángulo isósceles son iguales.
- Si dos líneas rectas se intersecan, los ángulos opuestos son iguales.
- Un triángulo se determina, dando su base y los ángulos relativos a la base.
La formulación de estos teoremas representa el talento griego para realizar generalizaciones y establecer leyes universales a partir de casos concretos. Así, se demuestra que algo nuevo surgía en el modo de pensar la realidad.
El magnetismo
En la actualidad, contamos con grandes avances en el campo de la física, en particular, en la electricidad y el magnetismo. Aun así, los orígenes de estas pueden rastrearse en este personaje de la historia, según sostiene una publicación de la revista Intropica.
En este sentido, él asumió que si un material es atraído por otro objeto se debe a que estos elementos están vivos. Y llegó a esta conclusión a través de las pruebas con elementos naturales como plumas, su propia piel, lana y ámbar.
Si bien es cierto que su apreciación es errónea, no podemos dejar de mencionar que representó un hito importante para la época. Esto a pesar de que Tales no sabía que se trataba un evento de la física.
Predicción del eclipse
Otro de los aportes de este intelectual fue el descubrimiento de un eclipse solar. Según los testimonios de sus contemporáneos, Tales vaticinó la fecha en que sucedería, un 28 de mayo del año 585 a. C. Este evento fue muy importante, ya que explica la popularidad de su figura como astrónomo.
Algunas curiosidades que demostraron su ingenio
Existen varias anécdotas que demuestran la inteligencia de este matemático importante. A continuación, nos referiremos a tres de ellas, en el ámbito de los negocios, el cálculo y la astronomía.
- Las pirámides de Egipto: haciendo uso de las matemáticas y los teoremas, determinó la altura de la Gran Pirámide de Egipto. Para ello, apeló a calcular a partir de las sombras que estas estructuras generaban.
- Astucia como negociante: en su época de comerciante, Tales ayudó a que los animales de carga no se hundieran en el agua. Por medio de esponjas que absorbían el líquido, las mulas aprendieron, a través de la repetición, a no sumergirse más en el río. Así, los productos que transportaban llegaban en óptimas condiciones a su destino.
Un legado de pensamiento racional, curiosidad y audacia intelectual
En los inicios de la filosofía, Tales de Mileto emerge como una figura muy importante del pensamiento en Occidente. Su noción revolucionaria de arché marcó el inicio de una búsqueda intelectual sobre la esencia de la realidad.
Lo más importante que nos dejó este matemático fue el uso del pensamiento racional para desentrañar los misterios que nos rodean. Por eso, su influencia perdura, recordándonos que la curiosidad y la audacia intelectual son los cimientos de la filosofía y la ciencia.