Puede que pienses que tienes tu dinero bajo control. Estás ahorrando y creando un fondo de emergencia, y te esfuerzas en el día a día por controlar tus gastos con una app fintech que te permite ajustar tus presupuestos personales.
Pero si aun así, descubres que no sabe adónde van a parar tus ingresos o que tiene que echar mano de los ahorros para cubrir facturas y gastos, podrías estar cometiendo errores con tu dinero de los que no es consciente.
La planificadora financiera certificada Chloe Moore señala tres errores comunes que ve que la gente comete y que los dejan sin dinero y bajo presión financiera.
1. Comprar una casa que no te puedes permitir
Comprar una vivienda que escapa a tus posibilidades es un error que te perseguirá durante años.
“Hay que tener en cuenta algo más que el pago mensual”, afirma Moore. “Hay mucho más que viene con la compra de una casa que la gente no tiene en cuenta, como los impuestos de bienes raíces o el mantenimiento. Es el costo total de la propiedad de la vivienda que muchas personas no consideran antes de comprar una casa.”
En definitiva, ser propietario de una casa requiere mucho más que el pago de la hipoteca, y si no estás preparado, esos costes pueden afectar mucho a tu cartera.
“Puede que quieras la casa con el gran jardín y la piscina, pero ¿has investigado cuáles serán los costes de mantenerlos? Este tipo de gastos pueden acumularse rápidamente y causar estragos en tu presupuesto”, recalca esta planificadora financiera.
2. No ocuparte debidamente de los impuestos
Atrasarse en la declaración de la renta y el pago de impuestos es un agujero del que puede ser difícil salir. “Hay multas asociadas con la presentación y el pago tardío de impuestos que pueden disparar tu factura”, destaca Moore a Business Insider.
Asegúrate de pagar tus impuestos a tiempo. Si tienes que establecer un plan de pago, hazlo y trabaja para pagarlo rápidamente. “Puede llevar años salir de la deuda tributaria, porque los intereses y las multas se siguen sumando”, explica.
3. Pagar de más por los gastos cotidianos
Puede que no lo veas porque solo estás pagando tus gastos como haces habitualmente, pero la inflación se ha colado en todo y ha encarecido los costes cotidianos.
“Estamos a principios de año y este es el mejor momento para analizar tus gastos y asegurarte de que no estás pagando de más. Todo es más caro ahora y, si no tienes cuidado, los gastos extra se comerán tu cartera”, dice Moore.
Comprueba lo que gastas cada día en el supermercado y en gastos mensuales como los servicios públicos y la gasolina. Intenta negociar un tipo de interés más bajo con las tarjetas de crédito si sus pagos han aumentado.
“Les digo a mis clientes que lo miren todo, incluso sus suscripciones. Es fácil pasar por alto los pequeños aumentos, pero suman. Siempre que empieces a pensar: “¿Adónde va mi dinero?”. Puedo apostar a que es debido a esos gastos cotidianos que han aumentado con el tiempo”, destaca esta exeprta..