Los deportes en directo están dando sus frutos a Netflix.
Según muestran los nuevos datos de suscripción que han sido publicados por la firma de análisis Antenna, la plataforma de streaming experimentó grandes picos en sus suscripciones diarias durante los principales eventos en directo del año pasado. Entre ellos se encontraban el combate entre Jake Paul y Mike Tyson y los partidos de la NFL en el día de Navidad.
En Estados Unidos, Netflix consiguió 1,4 millones de suscripciones para el combate de boxeo, mientras que los partidos de Navidad de la Liga Nacional de Fútbol Americano generaron 700 millones, tal y como se ha podido comprobar en el informe publicado por Antenna este martes.
Además de los deportes en directo, Antenna ha señalado que las restricciones de uso compartido de contraseñas de Netflix, que se implementaron en EEUU en 2023 (y en España pocas semanas después), han ayudado a aumentar las suscripciones al limitar el número de personas que pueden usar una cuenta.
“Fue un buen comienzo para Netflix en su incursión en la adquisición de deportes en directo”, ha asegurado Jonathan Carson, consejero delegado de Antenna, durante la presentación del informe llevado a cabo por su empresa.
Al parecer, Netflix está buscando más deportes y eventos en directo. La plataforma de streaming llegó a un acuerdo con la WWE y consiguió los derechos exclusivos en Estados Unidos para el Mundial Femenino de la FIFA para 2027 y 2031. Según declaraba la propia jefa de contenidos de la compañía, Bela Bajaria, durante la grabación del podcast The Town with Matt Beloni, Netflix también quiere emitir más partidos de la NFL.
De hecho, el servicio de vídeo bajo demanda destacó los deportes en enero al anunciar un récord de 19 millones de nuevos suscriptores. Netflix llegó a decir que la pelea entre Paul y Tyson había sido el evento deportivo más retransmitido de la historia de EEUU y apuntó a que los partidos de la NFL del día de Navidad también fueron los dos partidos más retransmitidos en la historia.
Carson, el CEO de Antenna, ha indicado que el salto de suscriptores de Netflix muestra que un gigante de la industria que ha existido durante tanto tiempo como esta organización todavía puede impulsar mejores resultados comerciales con nuevas herramientas y estrategias.
“Cuando Netflix anunció que se estaba metiendo en estos eventos en directo, estos grandes momentos en el tiempo, se planteó la cuestión de si podrían generar grandes oleadas de adquisición”, ha recordado este experto. “Los resultados han sido bastante impresionantes”
Los usuarios que se suscribieron a deportes en directo no eran tan leales como otros suscriptores de Netflix
Conseguir suscriptores solo es la mitad de esta historia. Netflix también necesita mantener a esos nuevos clientes.
Antenna ha revelado que el 79% de los suscriptores estadounidenses que se inscribieron para ver la pelea entre Paul y Tyson seguían suscritos un mes después. Según esta firma de análisis, esa cifra es algo inferior al índice de fidelidad de los usuarios de Netflix, que es del 86%.
Sin embargo, ese dato sigue siendo superior al índice de fidelidad de otras plataformas de streaming por suscripción premium que Antenna monitoriza. El 21% de los usuarios que se suscribieron para ver el combate cancelaron su suscripción en el plazo de un mes. En el caso de la competencia de Netflix, que en Estados Unidos incluye servicios como Paramount+ o Hulu, el porcentaje de usuarios que cancelaron en un plazo similar fue del 26%.
Los datos de Antenna también mostraron otros aspectos positivos para Netflix:
- Fue una de las cinco plataformas de streaming que aumentó sus suscripciones brutas a un ritmo de dos dígitos año tras año en 2024. También capturó el 15% de las suscripciones brutas en la categoría, en línea con Hulu y por detrás del 17% de Paramount+.
- Netflix tuvo la tasa de retención más alta para un servicio independiente, con un 74% de los usuarios que se suscribieron de julio a septiembre, manteniéndose en el servicio después de tres meses. Su tasa de retención solo fue superada en EEUU por el paquete de Disney y Warner Bros. Discovery, que tuvo una tasa de retención del 80% durante ese mismo período.