4 hábitos que podrían mejorar tu vida, según una comunidad de salud mental con 300.000 personas

La salud mental siempre ha sido importante, y ya estaba mencionada en el concepto de salud de la OMS, en el que define esta última como “un estado de completo bienestar físico, mental y social, y no solamente la ausencia de afecciones o enfermedades”.

Sin embargo, en los últimos años ha ido adquiriendo más notoriedad, en los medios, en los discursos de la clase política y en las conversaciones del día. El síndrome del burnout (que suele describirse como ‘estar quemado’); padecer ansiedad, estrés o depresión, o sentir que has perdido la ilusión por todo son algunas de las señales y consecuencias de problemas de salud mental.

A veces, la salud mental ha escalado posiciones en la lista de prioridades y superado otros factores, como el dinero.

En el caso de Julian Sarafian, que describe su historia como “la de una persona con grandes logros que luchó contra la ansiedad y la depresión graves” y con ataques de pánico, le llevó a cambiar su vida: “deprimido” y “completamente quemado” o agotado, en 2021 dejó su trabajo como abogado corporativo, que le reportaba unos ingresos de 200.000 dólares (unos 187.000 euros, al cambio actual) al año.

Entonces decidió “dar un paso atrás”, cuidarse, priorizar las rutinas saludables y llevar a cabo diversos negocios, actividades y decisiones, entre los que se incluye convertirse en defensor de la concienciación sobre la salud mental en las redes sociales, cuenta en un artículo publicado en CNBC.

Así, afirma haber creado una comunidad de más de 300.000 personas (entre TikTok, LinkedIn e Instagram) que, como él, “anteponen su bienestar a sus carreras” profesionales, comparte. A todas ellas les ha preguntado recientemente “¿Qué pequeño hábito no negociable ha cambiado más tu vida?”, para después resumir las 4 respuestas más populares:

Decir “no”

Saber decir que no es uno de los hábitos señalados por esta comunidad de salud mental, en apariencia pequeño pero de gran impacto potencial.

“Siempre he pensado que dejarse llevar por la corriente y ser flexible era una ventaja. Pero decir “sí” todo el tiempo —a más trabajo, actividades sociales, favores— puede convertirse fácilmente en sacrificar tus propias necesidades y deseos por los de los demás. Desde que empecé a decir “no”, mi vida se ha enriquecido y he tenido más tiempo para centrarme en las cosas que me importan”, celebra Sarafian.

“Empieza por aceptar únicamente proyectos adicionales que te entusiasmen. Rétate a ti mismo a rechazar al menos una oportunidad a la semana”, aconseja.

Decir “no” puede ser difícil, por ejemplo en el trabajo, ante lo que los expertos recomiendan pedir ayuda a los compañeros e implicar a tu jefe e, incluso, valorar otras oportunidades laborales fuera si se considera que la situación no mejorará.

Pensar en positivo y practicar la gratitud

“Gran parte” de las respuestas que ha recibido a su pregunta de los pequeños hábitos que más pueden cambiar la vida hablaban de “centrarse en los aspectos positivos en lugar de detenerse en los negativos”, explica Sarafian, que pasa luego a hablar de su propia experiencia.

“Llevo un diario de gratitud y, cuando me siento deprimido, respondo a estas preguntas:

  • ¿Qué ha ido mejor de lo esperado últimamente?
  • ¿Qué objetivo he alcanzado y en qué ha cambiado mi vida?
  • ¿Por qué estoy agradecido hoy?

Cuando termino, me siento con los pies en la tierra, más agradecido y centrado en lo que tengo en lugar de en lo que desearía tener”, expone.

Pensar en positivo, sin embargo, no tiene que equivaler a ignorar los problemas y las dificultades, como advierte Thema Bryant-Davis, presidenta de la Asociación Americana de Psicología, en una entrevista a CNBC.

“Cuando tenemos experiencias vitales desafiantes y las evitamos, acaban apareciendo de otras maneras, afectando a nuestro sueño o a la forma de criar a los hijos. Evitar no es lo mismo que curar”, concluye.

Yoga u otros ejercicios somáticos

Bryant-Davis también recomienda crear tu propio ritmo saludable y tus rituales de autocuidado para proteger tu salud mental. En esa línea, varias personas de la comunidad de Sarafian cuentan que han incorporado el yoga a su rutina de bienestar.

Él mismo aconseja practicar ejercicio somático (actividad física que se realiza con suavidad, centrándose en la experiencia interna, define), afirma que hacer posturas de yoga le ayuda a relajarse y comparte sus preferidas: la postura de la vaca y el gato, y la del niño

También puede ayudar otro tipo de ejercicios físicos, como deporte, caminatas y excursiones, y de actividades que resulten placenteras (como cocina, costura, cerámica, pintura, escritura, música, teatro…).

“Los famosos 8.000 pasos al día, según diversos estudios, pueden aumentar más la serotonina y por supuesto las endorfinas que muchos de los fármacos que podamos prescribir los médicos para la depresión”, explica Alejandro Martínez Rico, médico psiquiatra en Córdoba y profesional en Psiquiatrasonline.org, en una entrevista a Business Insider España.

Eliminar los hábitos tóxicos

Entre las respuestas que ha recibido Julian Sarafian, abogado licenciado en Harvard y creador de contenidos, se encuentran las de muchas personas que le han contado que “una ‘desintoxicación del teléfono’ ha mejorado su salud mental”. Ante esto, propone silenciar las notificaciones durante al menos una hora o poner límites de tiempo en el uso de dispositivos.

“Otras dicen que han reducido el consumo de sustancias poco saludables, como fumar cigarrillos o beber alcohol. Me identifico con esto. He consumido marihuana con regularidad durante los últimos 4 años, pero soy más productivo y estoy más en contacto con mis emociones cuando me tomo un descanso”, comparte.

Separar la salud física de “la mental, emocional y espiritual” es uno de los errores que se deben evitar para cuidar la propia salud mental, recuerda Ana Sánchez Anegón, terapeuta emocional y CEO de El Animal Emocional.

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